RIGLOS 03-02-08

Por encima del pequeño núcleo rural de Riglos ( 680 m ) se eleva el conjunto de monolitos más espectacular de la península, los famosos Mallos de Riglos.Su extremada verticalidad sobre la vega del río Gállego llama poderosamente la atención de escaladores, montañeros o simples turistas, que no dejan de admirar la belleza de sus desplomadas paredes, delicados espolones y apuntados monolitos de color pardo-rojizo, que parecen querer desplomarse sobre el caserío del pueblo. Encima del pueblo, el desplomado Mallo Pisón, es la mole más imponente y destacada del macizo de Riglos. Adosado al mismo se descubre la delicada silueta de El Puro, un singular monolito de 60 metros . A la izquierda, netamente diferenciado aparece otro enorme mallo: El Fire, que se observa enorme canto vertical a modo de titánico menhir alzado contra el cielo. En realidad los mallos se sitúan en la parte frontal del macizo montañoso que culmina en el monte San Román ( 1.179 m ).

Ioar (13/01/08)

El monte Joar ( 1.416 m ) es la cumbre más elevada de la sierra de Kodes, entre Araba y Nafarroa una montaña emblemática que debe ser ascendida en más de una ocasión. Su ladera Norte mira hacia el valle de Kanpetzu y se halla bien poblada de Hayedos y robledales. Destacan barrancos de gran interés y belleza como el barranco de la Dormida, que surca la vertiente Norte al pie de la agreste arista de Kostalera ( 1.234 m ), mientras que en la vertiente opuesta tenemos las curiosas formaciones rocosas de penitentes, entre las cuales destacan las llamadas Dos Hermanas.Esta vertiente Sur de la sierra de Kodes posee poca vegetación, y en los sitios donde hay corresponde a especies ya mediterráneas como la carrasca y la encina. Un conjunto de peñas calcáreas descienden de Joar ( 1.416 m ) más allá del Pico Royo ( 1.249 m ), entre las que destacan las ya citadas Dos hermanas. Cuentan con itinerarios de escalada para acceder a sus cimas. Una vieja leyenda nos relata que son las figuras petrificadas de dos hermanas de Uxanuri ( Genevilla ), trasformadas en piedra por invocación de su malvada madrastra al retrasarse en la llegada a casa en un día de fuerte tormenta. Las dos hermanas y otros monolitos de menor importancia enmarcan el pequeño Valle de los Penitentes, rodeado de riscos rocosos que recuerda a una procesión religiosa.